6.07.2008


Llevaba la coqutería en las venas, herencia de su madre quizás. Casi seguro.
Se reía sola de las cosas que el le decía "A ti nunca te engañé" "A ti nunca te mentí", se debatía entre creerle y no hacerlo. Pero aun
así se reía de la situación, se reía enfrente de él, le refregaba el pasado en la cara y lo disfrutaba; él también lo hacía, a pesar de todo lo que pasaron y no pasaron se reían juntos de su historia. Recordaban como eran algunas situaciones cuando estaban juntos...
- A ti te gustaban mis patitas jajaja- Le decía ella acordándose como él se lo repetía constantemente.
- Me encantan... no me gustaban. Me gustan- Le respondía el como si fuera lo mas normal del mundo. Ella solo se reía, un gesto de coquetería natural y la reacción frente a no saber que responder.
- A mi me mataba la curva de tu espalda- Le confesó, igual como en aquellas noches de hace más de un año.
-
Uffff, entonces mejor que no me veas, ahora estoy haciendo natación.
-
Jajajaja mejor que no me veas tú, estoy más flaca y mas pechugona... aunque pasa piola- Rebatió ella como queriendo ganar la competencia para que él quedara en desventaja.
- Ahora el físico no me importa tanto pero
ufffff... igual jajajaja.
- Jajaja el físico siempre importa, todos somos superficiales de algún modo- Era algo que le decía ella desde que se conocieron.
Era increíble... él le estaba insinuando algo. Ahora. Un año después. No lo podía creer, simplemente se reía de lo absurdo que era.
- Oye... y que te parece que nos juntemos un día de estos?- Ahora si que la sonrisa revoloteaba libre en sus labios, definitivamente le insinuaba algo.

Le dio un par de excusas
válidas... es que era verdad que no tenía tiempo. Entre las pruebas y un encuentro de jóvenes con suerte podía ver a su novio (novio del cual este sujeto estaba al tanto), por cierto... este encuentro de jóvenes le causo gracia a este hombre en cuestión, le valió un par de bromas por parte de él.
-
Abstinencia pastoral?!
- No seas loco- Le respondió riendo.
- Tú sabes que no creo en dios... y no estoy de acuerdo con la abstinencia, eso sí es locura.

- Eso quiere decir una cosa.

- Sé lo que estas pensando y no, no saques conclusiones apresuradas.- Lo conocía, sabía a lo que se refería y ella no iba a darle el gusto de responderle. Luego de un par de comentarios tribales...
- Te vas a tener que hacer un tiempo para mi.- Le dijo.

- Ya te dije que en las próximas dos semanas no creo que pueda.

-
Pucha...
- Por qué pucha? Querías verme?.- No era intencional hacer esas preguntas, surgían, al igual que la risa que le seguía causando todo aquello.
- Sí, quería verte. Yo también ando medio apretado de horarios, estoy
llendo al club todos lo días 3 horas.
- En algún momento habremos de coincidir.

- Podrías venir a mi casa a ver películas... cocino yo.- Eso sólo significaba una cosa en su idioma... ya no lo insinuaba, casi se lo estaba gritando. Pero cocinaba tan bien... y otra ves la risa aparecía en la conversación. - Jajajaja no sé, no creo... quizás en otro lado, además ya te dije que no tenía tiempo.- Ella, a su casa, a ver películas? No, definitivamente no.
- Me están llamando a comer, y ya me he despedido como 3 veces... ahora sí me voy.- Y en esas veces las
insinuación cada vez peores... este hombre no tenía remedio.
- Pero vuelve, come y vuelve...
- Que estás necesitado.- Se burló ella.

- Que pesada.

- Me fui, vuelvo en un rato.

Cuando volvió de cenar se encontró con un mensaje de él que decía que
también se había ido a comer... cuando él regresó le dijo que se iba a acostar porque comió mucho... "besos, te quiero, cuídate y estudia" Eso fue lo último antes de verlo off-line. In-cre-í-ble. Él no había cambiado en lo más mínimo, pero aun así se reía... que mas iba a hacer? antes lloraba... lloraba tardes enteras por él. Ahora se reía, era tan ilógico todo, que reír era lo único que brotaba de ella; había dejado de afectarle hace ya bastante tiempo.